Los 6 pilares de la Semana Europea de la Energía Sostenible
La Semana Europea de la Energía Sostenible se ha centrado en tres ámbitos, pero también ha girado en torno a 6 temas muy importantes
En los últimos días se ha celebrado la Semana Europea de la Energía Sostenible. Del 10 al 12 de junio, cientos de representantes políticos, empresas, científicos, ONGs y ciudadanos se han reunido en Bruselas para debatir sobre el camino hacia una Europa energéticamente más sostenible. Con un total de 60 comunicaciones, se ha debatido sobre las mejores medidas para alcanzar el objetivo de cero neto en 2050. Un objetivo que, de hecho, se cuestionó en una de las comunicaciones.
No será sencillo, desde luego, pero el precio a pagar si no lo conseguimos es muy alto. Por eso suelen celebrarse este tipo de eventos. En el caso de la Semana Europea de la Energía Sostenible cuenta con el punto fuerte de permitir el acceso a cualquier ciudadano que lo desee. Siempre con inscripción previa, claro. Esto es muy importante, pues no importa nuestra influencia, poder o nivel económico. El planeta es de todos nosotros por igual.
En esta ocasión, el lema de la Semana Europea de la Energía Sostenible ha sido “Pasa a la acción, cambia la energía”. Se ha centrado en tres ámbitos: hogar, movilidad y comunidades energéticas. Pero, sobre todo, ha girado en torno a 6 grandes protagonistas, muy presentes en buena parte de las 60 comunicaciones que se han presentado a lo largo de estos tres días. Vamos a ver cuáles son.
Índice del artículo:
Los 6 protagonistas de la Semana Europea de la Energía Sostenible
En realidad, los temas de las 60 presentaciones que se han hecho del 10 al 12 de junio han sido mucho más variados. Pero, si tengo que elegir solo algunos, estos son los 6 que me han parecido más importantes.
1. El necesario papel de la ciudadanía
Como ya hemos visto, la Semana Europea de la Energía Sostenible es un evento en el que no se duda en dar voz a la ciudadanía. Por eso, tampoco es extraño que esta haya formado parte de las temáticas de algunas de las presentaciones que se han hecho a lo largo del evento. Destacan por ejemplo algunas de las comunicaciones del primer día, en las que se ha ensalzado la necesidad de empoderar a los ciudadanos para formar parte del camino hacia la transición energética.
Esto puede conseguirse, por ejemplo, haciendo más accesibles las viviendas de alta eficiencia energética, que permiten a los ciudadanos un mayor acceso a la descarbonización. Pero también contribuyendo al reciclaje de los puestos laborales de las empresas, de modo que no solo contribuyamos a los objetivos desde casa. También como empleados en nuestros respectivos trabajos.
2. El hidrógeno verde es esencial en el transporte
Si queremos obtener ese objetivo del cero neto, es importante fomentar recursos como el hidrógeno verde. Este es el hidrógeno que se obtiene químicamente al separar las moléculas de agua en sus dos componentes: el oxígeno y el hidrógeno. Dicha separación se hace mediante una corriente eléctrica que, para que pueda considerarse hidrógeno verde, debe proceder de energías renovables.
El hidrógeno se pasa a tanques de combustible desde los que se extrae para entrar en contacto de nuevo con el oxígeno, revirtiendo el proceso y generando energía eléctrica para su uso en casi cualquier ámbito. Es una forma de obtener electricidad totalmente limpia, sin la más mínima liberación de emisiones contaminantes.
Por desgracia, a día de hoy cuenta aún con algunas limitaciones. Una de las principales es su precio, aún muy elevado. También es un problema la falta de suficiente infraestructura para obtenerlo a gran escala, así como la eficiencia energética, aún más baja que con otros métodos mucho más contaminantes. Finalmente, el hidrógeno verde está limitado por la necesidad alta de fuentes de energía renovables y por el hecho de que es un gas muy inflamable, por lo que se necesitan protocolos de seguridad muy exhaustivos.
Todo esto es lo que se ha discutido en algunas de las comunicaciones de la Semana Europea de la Energía Sostenible. Con suficientes cabezas pensando en ello, se pueden obtener mucho más rápido las soluciones. Pero, sobre todo, con muchos políticos conscientes del problema, se puede financiar la búsqueda de dichas soluciones.
3. La IA como arma de doble filo
La IA puede ayudar a gestionar los recursos energéticos, pero también puede consumir muchos
Como es normal en los tiempos que corren, la Inteligencia Artificial también ha tenido un papel destacado en la Semana Europea de la Energía Sostenible. Sobre todo, su presencia en las comunicaciones ha puesto sobre la mesa su papel como arma de doble filo. Y es que, por un lado, puede ayudarnos a caminar hacia la descarbonización en muchos ámbitos. Gracias al uso de sensores manejados por algoritmos de Inteligencia Artificial se pueden optimizar muchísimo los recursos energéticos, utilizándolos solo cuando son necesarios. Es aplicable en áreas como la agricultura, la domótica de edificios o el urbanismo.
En el otro extremo, por desgracia, nos encontramos con la ingente huella de carbono que supone la IA. Su consumo tanto de electricidad como de agua es elevadísimo, por lo que puede empeorar parte de lo que soluciona. Por eso, una de las comunicaciones de este evento europeo ha ido dirigida a la búsqueda de soluciones para reducir la huella energética de los centros de datos desde los que se maneja toda esa información de la IA. Aunque, incluso así, aquí también entra en juego de nuevo la ciudadanía, pues el uso de la IA con cabeza es esencial para que no interrumpa nuestro camino hacia la descarbonización.
4. Las comunidades energéticas
En buena parte de las sesiones de la Semana Europea de la Energía Sostenible se ha dado gran importancia a las comunidades energéticas. Una de las presentaciones, de hecho, señaló de forma irónica que no debemos compararlas con las comuna hippie. Aunque, en general, compartir los recursos no tiene nada de malo para lograr el planeta que todos queremos construir.
Todo esto se consigue al actuar como una sola entidad, de modo que las comunidades energéticas puedan acceder a todos los mercados energéticos adecuados en igualdad de condiciones con otros actores del mercado. Según la legislación de la UE, “las comunidades energéticas pueden tomar la forma de cualquier entidad legal, incluida una asociación, una cooperativa, una sociedad, una organización sin fines de lucro o una sociedad de responsabilidad limitada”.
Todo esto se fomenta a través del Plan de Acción de Energía Asequible, que “presenta a las comunidades energéticas como una solución para beneficiarse de la energía renovable asequible, enfatizando la importancia de fortalecer estas iniciativas para permitir que las comunidades locales, los ciudadanos y las empresas inviertan colectivamente en proyectos de energía limpia a nivel local”. Esto es beneficioso para todos, ya que proporciona a todos los actores la capacidad de producir, vender y consumir su energía renovable.
5. Cuidado con el Greenwashing
Como no podía ser de otra manera, durante la Semana Europea de la Energía Sostenible se ha hecho hincapié en tomar medidas contra el Greenwashing y diferenciar las iniciativas realmente beneficiosas de aquellas que solo constituyen una cortina de humo para ocultar malas prácticas medioambientales. Si queremos lograr la descarbonización, es muy importante educar a la ciudadanía para distinguir estas artimañas, a la vez que se sancione con más fuerza a las compañías que sigan recurriendo a ellas.
6. La energía nuclear no podía faltar
Si hablamos de descarbonización, es inevitable hablar de energía nuclear. Es cierto que muchísimas personas están en contra de su uso. Sin embargo, es evidente que es una forma limpia de obtención de energía, por lo que muchos países han optado por recurrir a ella como ayuda hasta que sea posible tener un sistema que soporte un mayor aporte de energías renovables.
Esto depende mucho del país. En España, por ejemplo, esa es justamente la estrategia actual, aunque la idea es ir desmantelando poco a poco las centrales nucleares que se encuentran activas en el país. Hasta que eso ocurra, debemos tener en cuenta que las medidas de seguridad de este tipo de centrales son extremadamente precisas, por lo que un accidente de la magnitud de Chernóbil sería bastante raro.
¿Están en la misma situación todos los países que participan en la Semana Europea de la Energía sostenible?
La respuesta a esta pregunta es muy sencilla: no. Actualmente, el nivel de descarbonización de los distintos países europeos es muy variado.
Más del 50 % de electricidad que consume España procede de energías renovables
Según Retema, a febrero de 2025 los dos países líderes en la transición energética europea eran Austria y Suecia. Con cifras de 2023, el primero consumió un 87,8 % de electricidad procedente de fuentes renovables. Suecia le siguió muy de cerca, con un 87,5 %. Austria utiliza principalmente energía hidroeléctrica, mientras que Suecia opta por una combinación de energía hidroeléctrica y eólica. Les sigue en la clasificación Dinamarca, con un 79,4 % de energía renovable, especialmente eólica.
Con respecto a España, se encuentra entre los países que progresan adecuadamente, con más de un 50 % de aporte energético sostenible. Concretamente, en 2023 dicha cifra fue de un 56,9 %.
Por otro lado, a la cola de la clasificación nos encontramos con Malta, con un 10,7 %, seguida de Chequia, con un 16,4 %.
Todo esto nos demuestra que, efectivamente, la Semana Europea de la Energía Sostenible es muy necesaria, porque aún nos queda mucho camino por andar. En esta ocasión se han obtenido conclusiones interesantes sobre posibles medidas a tomar. Ahora solo queda saber cuánto se tardarán en poner en marcha.
